La jornada se inauguró con la charla de la Dra. Ferrer, quien reflexionó sobre el valor de publicar como un acto de liderazgo y transformación académica y social
La Escuela de Enfermería UC llevó a cabo una nueva edición del Retiro de Escritura Académica, una instancia que busca fortalecer la productividad científica de la comunidad académica. Por medio de un proceso de postulación y selección, un grupo de académicas y académicos dedicó una semana exclusivamente a la formulación de proyectos o artículos científicos, contando además con acompañamiento en duplas para recibir retroalimentación y potenciar sus avances.
En esta oportunidad, la jornada comenzó con la charla de la Dra. Lilian Ferrer, titulada “Publicar es liderar”, en la que invitó a reflexionar sobre el profundo impacto de la escritura científica. “Cada publicación académica puede ser mucho más que un requisito: es una herramienta de transformación. Publicar permite visibilizar el conocimiento, fortalecer a nuestras instituciones, influir en políticas públicas, inspirar a nuevas generaciones y conectarnos globalmente. Desde esa perspectiva, publicar es un acto de liderazgo académico y social”, señaló.
Sobre esta instancia, la Coordinadora de Gestión de Investigación de la Subdirección de Investigación de la Escuela, Karen Campos, destacó que de la charla “derivaron potentes reflexiones respecto de la responsabilidad que conlleva la voz de cada científico en sus publicaciones, cómo esto permite ocupar espacios e incluso ser la voz de otros que, tal vez no pueden ser escuchados, apoyado mediante datos concretos y análisis. Por otro lado, se comentó como las publicaciones científicas son otra forma de enseñar y la importancia que tiene la planificación estratégica en la carrera científica”.
La Dra. Ferrer además compartió que la preparación de esta sesión también fue un ejercicio personal de orden y renovación. “Fue una experiencia muy significativa para mí. Dedicar tiempo a pensar en los mensajes clave y buscar una narrativa motivadora me permitió reafirmar convicciones sobre el valor de publicar. Y ya en el retiro, aunque el formato fue más expositivo, sentí una conexión muy genuina con los participantes. Había un interés real por reflexionar sobre el sentido de lo que hacemos, y eso lo vuelve muy valioso”, expresa.
Respecto del beneficio para la comunidad académica, destaca que estas conversaciones ayudan a resignificar la publicación científica, que muchas veces se percibe solo como una exigencia externa. “Invitar a verla como una estrategia para amplificar nuestra voz, generar cambios concretos y formar a otros, es una manera de empoderar a nuestra comunidad. Además, compartir experiencias reales de planificación y colaboración abre caminos concretos para quienes están iniciando o retomando sus trayectorias investigativas”, indica.
Finalmente, la Dra. Ferrer resaltó la importancia de cultivar estos espacios de retiro intelectual. “No son pausas en nuestro trabajo, sino combustibles para avanzar con más claridad. Ojalá cada uno de nosotros salga de aquí con una pregunta poderosa en el corazón y el deseo profundo de contar su historia al mundo, con rigor, pasión y sentido. Porque al final, publicar no es el fin… es el medio para transformar”, concluye.