Acreditación 2018: todos invitados a participar

Ha sido un trabajo constante, minucioso y exhaustivo el que la Escuela de Enfermería UC ha desarrollado en miras al proceso de reacreditación de su programa de pregrado para este 2018, en la búsqueda permanente de la excelencia académica. Hoy, se encuentra en la primera fase: la de autoevaluación.

De esta forma, el pasado 5 de octubre se realizó la reunión Hito del Proceso de Autoevaluación, instancia donde asistieron autoridades, profesores, alumnos y administrativos. “Como Escuela de Enfermería UC estamos centrados en la calidad de nuestros procesos y resultados en forma continua, siempre intentando mejorar. Nos interesa, realmente, entregar una formación de la más alta calidad. Estamos realmente comprometidos con la formación de profesionales de Enfermería y Enfermería-Obstetricia, de modo que sean un aporte al país; profesionales en los que la sociedad puede confiar”, sostuvo María Isabel Catoni, Directora de la Escuela de Enfermería UC.

En la oportunidad se detalló cómo se ha organizado nuestra Escuela, para llevar a cabo esta etapa de la mejor manera. “Yo me siento honrada y muy orgullosa de conducir este proceso. Tengo mucha esperanza que esto va a ser un proceso enriquecedor para la comunidad y, en el fondo, vamos a demostrar que seguimos siendo de calidad”, manifestó Luz María Herrera, Directora de Pregrado de la Escuela de Enfermería UC.

Igualmente, se ahondó en la relevancia que tiene este proceso, a la hora de ser una buena oportunidad para perfeccionar y revisar los programas de formación. “El sentido final de la Acreditación siempre es la mejoría de nuestra calidad. Está la burocracia, están los papeles, pero lo que finalmente vamos a conseguir es que hayamos mejorado en la calidad. Por lo tanto, es una tremenda oportunidad para todas las Instituciones y Escuelas que se sometan a estos procesos para conseguir algo que nos haga mejores”, enfatizó el Dr. Jaime Godoy, Vicedecano Académico de la Facultad de Medicina.

Uno de los puntos centrales que se destacó es la importancia que tiene que toda la comunidad se involucre y aporte en las diferentes actividades que se realizarán, tales como los encuentros de levantamiento de opinión, de diálogo y discusión. “Esta es una gran oportunidad para revisar cómo lo estamos haciendo, con espíritu crítico y constructivo. Uno de los elementos fundamentales, y creo que hay un gran augurio de que eso va a ser así, es que este proceso tiene que ser participativo”, recalcó Juan Larraín, Vicerrector Académico de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

Esta es la tercera vez que el programa de pregrado de nuestra Escuela se somete a este proceso de aseguramiento de la calidad. Actualmente, cuenta con la certificación máxima entregada por la Comisión Nacional de Acreditación (CNA): siete años, con vigencia hasta diciembre del 2018.